CUARESMA 2017: Música y Semana Santa V

Ya tan sólo nos queda una semana para que todo comience de nuevo, para aguantar el tiro, vamos con otro artículo en nuestra sección de música cofrade:

EL BOOM DE LOS 90

Llegamos ya al final de nuestro vieja por la historia de la música cofrade y nos adentramos en los últimos años del siglo XX. Las hermandades cada vez se preocupan más por su patrimonio y por todo lo referente a su salida procesional. Surgen hermandades y grupos de jóvenes (y no tan jóvenes) por toda la geografía nacional que quieren renovar lo que ya es viejo y siempre es joven. La Semana Santa está en pleno auge. Y la música cofrade no se queda atrás.

En los ochenta ya se comienza a atisbar algo que será patente en los 90 y ya en este siglo. Están surgiendo nuevos subestilos y los que ya existían están evolucionando. Estos nuevos subestilos se engloban dentro de la gran familia andaluza. Granada y Málaga. Aunque Sevilla sigue siendo el centro de la región, estas dos ciudades se desmarcan y comienzan a crear escuela. Málaga, aunque recoge elementos del folklore andaluz y del flamenco, su carácter fúnebre, su forma estructural más cerrada y su instrumentación más clásica la convierten en un punto intermedio entre Sevilla y el estilo general. En Granada, por el contrario, nacen marchas que siguen más el modelo sevillano, con una instrumentación amplia y más arriesgada y ritmos propios de las marchas de palio, pero con ese tinte clásico de la marcha fúnebre. Victor Ferrer, José Faus o Miguel Sánchez Ruzafa son los grandes exponentes de este estilo.

Es en los ochenta que comienza su trayectoria uno de los compositores más fructíferos del ámbito cofrade, con 110 marchas compuestas, tanto del estilo Sevillano como del estilo General. Abel Moreno, el primero que, con sus obras, impulsará un cambio modernizante en la marcha fúnebre. El mismo se define seguidor de Cebrian, en cuanto al desarrollo melódico y estructural de sus marchas y, en cuanto a la instrumentación y la orquestación, de Ricardo Dorado. José Vélez y los compositores actuales de esta rama siguen esta corriente. Cuesta comprender cómo podemos incluir a Mariano San Miguel y Ricardo Dorado en un mismo estilo, sin embargo tienen un origen común: la música romántica. Aún en marchas como Crucifixus se pueden ver rasgos que recuerdan a las obras decimonónicas.

Como ya dijimos en el primer capítulo de esta temporada de Redes Cofrades, el famoso "Estilo Levantino" no existe. De hecho, en toda esta serie que hemos realizado durante estos cinco viernes, en ningún momento ha aparecido el término. Todos los compositores que han nacido a la orilla del segura se pueden clasificar dentro del estilo general en que estamos insistiendo tanto. 

La marcha de hoy será una obra del malagueño Jose Antonio Molero Luque, una de las grandes obras del estilo malagueño y dedicada a la Piedad de Cieza:



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