DATOS
Día: Lunes Santo.Datación: 2001.
Horario: 21:30 horas.
Horario de Finalización: 1:00 horas (Martes Santo).
ITINERARIO
Plaza Mayor, Cid, La Parra, Plaza del Comisario, Pinos, Larga, Buitragos, San Sebastián, Mesones, Cadenas, Barco, Hoz y Plaza Mayor.
PASOS
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RESEÑA HISTÓRICA
Aunque el Vía-Crucis procesional del Stmo. Cristo de la Sangre sea una de las procesiones más jóvenes de nuestra Semana Santa, la tradición del rezo del Vía-Crucis es bastante añeja. Originalmente, el Vía-Crucis de la Semana Santa de Cieza se realizaría la madrugada de Viernes Santo en los aledaños a la ermita del Calvario (del Santo Cristo) con la imagen del Cristo del Calvario (Cristo del Consuelo) presidiéndola. Durante el siglo XIX, a medida que la devoción al Cristo y su presencia en el resto de desfiles pasionales va creciendo, el Vía-Crucis va cayendo en decadencia, desapareciendo definitivamente en los años anteriores a la Guerra Civil.
Aunque ha habido distintos intentos de recuperar e incorporar un Vía-Crucis al grueso de las procesiones, ninguno fructificará, manteniéndose únicamente los que realiza Nuestro Padre Jesús de Medinaceli los viernes de Cuaresma.
En 2001, la Hermandad de Santa María Magdalena consigue por fin incorporar un Vía-Crucis funcional a la Semana Santa, ocupando así la noche de Lunes Santo. Para ello, adquieren del escultor sevillano Luis Álvarez Duarte la imagen del Cristo de la Sangre, recuperando de esta forma una advocación perdida de nuestra Semana Santa. El cortejo lo abre un grupo de tambores sordos, a los cuales sigue el tercio de penitentes de la Hermandad. Para esta procesión, utilizan verdugo rojo y cirios, en lugar de su habitual indumentaria de capuz, capa y báculos. En las filas desfila una Cruz guía escoltada por cuatro ciriales, que se va deteniendo al llegar al punto de cada estación. Cuando el Cristo llega hasta donde está parada la Cruz, se detiene, para la música y se realiza la meditación y rezo correspondiente. Para tal efecto, se encarga cada año a un sacerdote, el cual presidirá el cortejo, la redacción de las 15 meditaciones del Vía-Crucis.
Mención especial merece el Vía-Crucis de 2014 en el cual, con motivo del centenario de la Junta de Hermandades Pasionarias, se ilustraron las 15 estaciones con imágenes y pasos de las distintas cofradías.
Aunque ha habido distintos intentos de recuperar e incorporar un Vía-Crucis al grueso de las procesiones, ninguno fructificará, manteniéndose únicamente los que realiza Nuestro Padre Jesús de Medinaceli los viernes de Cuaresma.
En 2001, la Hermandad de Santa María Magdalena consigue por fin incorporar un Vía-Crucis funcional a la Semana Santa, ocupando así la noche de Lunes Santo. Para ello, adquieren del escultor sevillano Luis Álvarez Duarte la imagen del Cristo de la Sangre, recuperando de esta forma una advocación perdida de nuestra Semana Santa. El cortejo lo abre un grupo de tambores sordos, a los cuales sigue el tercio de penitentes de la Hermandad. Para esta procesión, utilizan verdugo rojo y cirios, en lugar de su habitual indumentaria de capuz, capa y báculos. En las filas desfila una Cruz guía escoltada por cuatro ciriales, que se va deteniendo al llegar al punto de cada estación. Cuando el Cristo llega hasta donde está parada la Cruz, se detiene, para la música y se realiza la meditación y rezo correspondiente. Para tal efecto, se encarga cada año a un sacerdote, el cual presidirá el cortejo, la redacción de las 15 meditaciones del Vía-Crucis.
Mención especial merece el Vía-Crucis de 2014 en el cual, con motivo del centenario de la Junta de Hermandades Pasionarias, se ilustraron las 15 estaciones con imágenes y pasos de las distintas cofradías.
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